Se ha detectado material genético del virus en el crucero Diamond Princess más de dos semanas después de que fuera desalojado. No obstante, los investigadores advierten de que a esas alturas, el ARN encontrado podría no ser contagioso. El hallazgo refuerza la importancia de limpiar bien casas y hospitales
La noticia: 17 días después de haber sido desalojado, todavía se han encontrado restos de coronavirus (COVID-19) en el crucero Diamond Princess, según una nueva investigación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. (CDC, por sus siglas en inglés). El hallazgo sugiere que el virus puede persistir en las superficies durante mucho más tiempo de lo que se pensaba. La información previa, publicada en un estudio en la revista New England Journal of Medicine a principios de este mes, afirmaba que el coronavirus podía sobrevivir en el aire durante varias horas y sobre acero y el plástico durante al menos tres días.
El último estudio: Tras examinar el crucero Diamond Princess, que el mes pasado fue puesto en cuarentena en Yokohama (Japón), los investigadores encontraron ARN del coronavirus en las cabinas de los pasajeros infectados hasta 17 días después de desalojar el barco, pero antes de desinfectarlo. Sin embargo, los CDC señalan que “el ARN no necesariamente significa que hubiera virus vivos”. Por lo tanto, no se puede afirmar si las personas habrían podido infectarse de haber estado en contacto con las superficies donde se encontró el virus.
Qué significa: Limpiar y desinfectar adecuadamente las superficies acaba con el coronavirus. Se necesita más investigación antes de poder sacar conclusiones firmes sobre exactamente cuánto tiempo podría sobrevivir el virus en superficies sin limpiar, y qué nivel de riesgo representa a medida que pasa el tiempo.
No obstante, el hecho de que pueda persistir durante mucho más tiempo de lo que pensábamos pone de relieve la necesidad de estar especialmente atentos a la limpieza profunda de casas y hospitales en los que haya estado cualquier persona con sospecha de COVID-19, y hacer lo mismo para cualquier negocio público, como los gimnasios, bares y restaurantes cuando llegue el momento de reabrirlos.