The Matrix Resurrections está a la vuelta de la esquina. Y aunque el hype está por las nubes, lejos queda los tiempos en los que la épica de las Wachowski era las que impulsaban el debate de la cultura popular.
No obstante, en du día Matrix era una máquina de producir contenido alredor de sus películas… y de los videojuegos. Enter The Matrix y Path of Neo fueron, y son, grandes videojuegos, y el lanzamiento de la nueva película también viene acompañada de uno.
Puede que The Matrix Awakens, el nuevo videojuego que llega de la mano de The Matrix Resurrections, sea solo una demo, pero lo cierto es que como los anteriores señalan el camino hacia dónde debe moverse la industria. Y lo hace por dos razones, poniendo sobre la mesa las posibilidades de la nueva generación y de Unreal Engine 5, y por ser absolutamente espectacular. Sin medias tintas.
Una demos jugable que te permite explorar el mundo de Matrix
The Matrix Awakens llega para ir abriendo boca de cara al estreno. Y lo hace de tres formas: como pequeña demo jugable para las consolas de nueva generación, como material publicitario de la película, y como demostración de las asombrosas capacidades de Unreal Engine 5 para los juegos de próximo hornada.
Tres motivos, por sí solo independientes pero que te dejarán con la boca abierta si tienes alguna de la consolas en las que puede correr le demo. Esta experiencia, como la llaman sus creadores, ha sido ideada y desarrollada por miembros del equipo de la película original, incluida Lana Wachowski.
The Matrix Awakens es en realidad una cinemática increíblemente realista que, a su vez, pasa a convertirse en una trepidante experiencia de disparos en tercera persona de forma trasparente y tremendamente realista.
El apartado jugable es una secuencia de persecución de coches llena de acción (que recuerda a Matrix 2). No obstante, lo jugable también ofrece un mundo abierto rico y muy detallado para explorar que deja con la boca abierta por su calidad gráfica.