Las extrabajadoras se sumaron esta semana a una demanda colectiva por discriminación contra del gigante de los videojuegos
Ocho mujeres robustecieron esta semana el caso de discriminación que enfrenta Sony. Las extrabajadoras de PlayStation se han sumado a una demanda colectiva iniciada en noviembre de 2021 en un tribunal de California que denunció el ambiente machista que se vivía en uno de los gigantes de los videojuegos. La empresa había pedido el mes pasado al juez desestimar la demanda ante la falta de detalles. En respuesta, varias antiguas empleadas dieron un paso al frente para describir un “ambiente tóxico” donde imperaba el machismo en las oficinas de Estados Unidos.
En noviembre pasado, Emma Majo, una analista informática, acudió a un tribunal de California para quejarse de un despido injustificado y acusar a la empresa de sexista. En su escrito, aseguró que un superior hombre se negaba a contestarle por el solo hecho de ser mujeres y tampoco pudo competir por aumentos y promociones por una “cultura laboral dominada por los hombres”. La situación, añadió, no era una cuestión personal sino generalizada en la empresa. No es una acusación solitaria en la industria de los videojuegos. Ubisoft, Activision y Riot Games, desarrollador del popular League of Legends, han enfrentado señalamientos similares.