Psicologa Laura Rodríguez Víquez
“nunca se había protegido tanto a las mujeres”.
AMLO
La OMS define a la violencia como el uso intencional de la fuerza física, amenazas contra uno mismo, otra persona, un grupo o una comunidad que tiene como consecuencia o es muy probable que tenga como consecuencia un traumatismo, daños psicológicos, problemas de desarrollo o la muerte.
El género es el conjunto de ideas, representaciones, prácticas y prescripciones sociales que una cultura desarrolla desde la diferencia anatómica entre hombres y mujeres para simbolizar y construir socialmente lo que es “propio” de lo masculino y lo femenino.
La violencia contra las mujeres, se define como cualquier acción u omisión, basada en su género, que les cause daño o sufrimiento ya sea psicológico, físico, patrimonial, económico, sexual o la muerte, tanto en el ámbito privado como en el público. Este tipo de violencia, se da al interior de la familia o en cualquier otra relación interpersonal, independientemente de que el agresor comparta o no el mismo domicilio que la mujer.
La violencia contra las mujeres se puede manifestar de diferentes formas, de manera física por medio de golpes, laceraciones, quemaduras, de manera sexual, por medio de abusos, violaciones o vejaciones, psicológica y económica; sin embargo este tipo de violencia sólo forma parte de lo que Johan Galtung, llama violencia directa es decir solamente es la punta de un iceberg.
Johan Galtung representa la dinámica de la generación de violencia en conflictos sociales por medio de un triángulo de la violencia, en el cual representa a la violencia como si fuera un iceberg, en donde la violencia visible sólo es una pequeña manifestación del conflicto que vive el entramado social.
En este sentido resolver el problema de violencia de género implica actuar en todos los tipos de violencia, que serían tres:
- La violencia directa: la cual es visible, por medio de comportamientos y responde a actos de violencia. Este tipo de violencia puede ser física económica patrimonial sexual y psicológica, estos pueden manifestarse por medio de autoestima baja, sentimientos de miedo, de ira, de vulnerabilidad, de tristeza, de humillación, de desesperación, inestabilidad laboral, o trastornos psiquiátricos como del estado de ánimo, de ansiedad, estrés postraumático, de personalidad, abuso o dependencia a sustancias, ideación o intento suicida, entre otros.
- La violencia estructural: que se centra en el conjunto de estructuras u organizaciones, las cuales no permiten la satisfacción de las necesidades, se manifiesta a través de las desigualdades sociales, políticas públicas y legislaciones.
- La violencia cultural: la cual crea un marco legitimador de la violencia, se manifiesta por medio de simbolismos, de la religión, de ideologías, del lenguaje, de la ciencia, con el objetivo de cumplir una función legitimadora de la violencia directa y estructural.
Estas formas de violencia se interrelacionan, afecta no solo a las víctimas, impactan en la dinámica de familias, comunidades y culturas; reforzando otros tipos de violencia prevalecientes en la sociedad.
La violencia contra las mujeres en México durante el confinamiento
La Red Nacional de Refugios reporta que en el período de confinamiento las llamadas de auxilio hechas por mujeres incrementaron en un 17%, por otro lado el 19% del total de estas llamadas, se realizaron por alguna persona de la red de apoyo de la víctima, un amigo, un familiar o un vecino, la red nacional de refugios también señala que las solicitudes de refugio incrementaron hasta en un 50%.
El informe de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública, dió a conocer que el número acumulado de llamadas por violencia fue de 13,382 del 1 de enero al 30 de abril del 2020 y para fines del 31 de mayo, este número incrementó a 16,581, por lo que es importante destacar que en mayo se registraron 3,199 llamadas de emergencia relacionadas con violencia, de lo cual se concluye que la violencia hacia las mujeres sigue incrementando.
Ante estas cifras el gobierno manifiesta un discurso que busca invisibilizar estas cifras, señalando que ante el aislamiento por covid-19 “no implica el alza en la violencia de género”, Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, en su clásica conferencia de prensa, el 15 de mayo de 2020, dijo que el 90% de estas llamadas de emergencia por violencia de género son falsas; tal como ocurre con las de amenaza de bomba o sabotajes en contra del METRO, sin embargo las instituciones públicas, mantienen la postura de que las llamadas son procedentes, es decir no son falsas.
Claramente se percibe a un gobierno insensible ante la violencia de género, incluso AMLO en sus declaraciones del día 14 de julio 2020, niega que haya disminución en el presupuesto y hace mención de que “nunca se había protegido tanto a las mujeres”. Desafortunadamente, estas declaraciones no coinciden con afirmaciones realizadas por instituciones comprometidas con la atención a mujeres violentadas, tal es el caso de la Red Nacional de Refugios para Mujeres, quienes por medio de Twitter exigen mantener el presupuesto y desmienten las afirmaciones de AMLO.
“Exigimos al estado mantener el presupuesto de la AVGM. ¡No al recorte!”
Para el gobierno de México una llamada de auxilio al no ser una denuncia formal, pierde validez, sin embargo es importante atender este tipo de llamadas, ya que las víctimas de violencia se encuentran en riesgo las 24 horas, viven con sus agresores por lo que tampoco se debe desestimar o desechar las llamadas realizadas por las redes de apoyo de las víctimas.
Es por ello que debemos de hacer un llamado al gobierno y a las personas que nos representan, con la finalidad de que realmente planteen políticas públicas y acciones concretas con relación a la violencia hacia las mujeres.
Las políticas públicas de México deben garantizar el acceso a la protección a las mujeres y niñas víctimas de violencia, deben asegurar la atención digna y oportuna en refugios seguros.
El gobierno a través de sus instituciones debe capacitar a las y los servidores públicos que atienden las líneas de ayuda para las víctimas con la finalidad de atender las llamadas de auxilio con una perspectiva de género.
Recomendaciones.
Si eres mujer y estás viviendo violencia dentro de tu hogar, te sugiero que:
- Mantén tu documentación personal y objetos de valor en un lugar que esté cercano a ti.
- Estar en contacto permanente con tus redes de apoyo.
Sí sufres violencia no dudes en llamar al 911 o ponte en contacto con la Red Nacional de Refugios al 800 822 4460. ¡No estás sola!
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