Queda muy poco para que los robots andantes y parlantes, se integren en nuestras vidas. En parte ya están aquí: usamos a diario los robots aspirador o los altavoces inteligentes que hablan con nosotros.

Pero lo que mucha gente está esperado son los robots antropomórficos, que imitan la morfología de una persona o animal. Ya se puede comprar un perro robot que nos lleva la compra o nos acompaña a hacer running por poco más de 2.000 euros.

Aunque suene extraño los robots no son una tecnología reciente. Ya existían en el siglo XIX, pero eran completamente distintos a cómo son ahora.

En 1845, tras 25 años de desarrollo, el inventor autríaco Joseph Faber presentó el primer robot parlante que se conoce. En realidad había otros, pero no eran tan realistas.