Un grupo de investigadores han conseguido aumentar las posibilidades de que aquello que observan no se trate de un agujero negro si no de un agujero de gusano, confirmando finalmente así su existencia.
Debido a las interesantes y enigmáticas características de los agujeros de gusano, muchos escritores de ciencia ficción los utilizan en libros y películas. Sin embargo, la idea de los agujeros de gusano ha cautivado a los científicos tanto como a estos artistas.
Y es que, aunque los investigadores nunca han encontrado un agujero de gusano en nuestro universo, estos los ven a menudo descritos en las soluciones de importantes ecuaciones físicas, como la teoría del espacio-tiempo y la relatividad general de Einstein.
Dado que la teoría de Einstein se ha puesto a prueba muchas veces y ha resultado ser correcta en todas ellas, algunos científicos han estado esperando que los agujeros de gusano existan en algún lugar del universo. Y parece que así ha sido. Los científicos afirman que los agujeros de gusano pueden existir realmente y que también sabrían cómo encontrarlos.
Los investigadores presentan la posibilidad de utilizar los datos del Telescopio de Horizontes de Sucesos (EHT) para determinar si un agujero negro es o no un agujero de gusano o simplemente se trata un agujero negro estándar.
Hasta ahora, las observaciones realizadas contaban con una precisión de que un agujero fuese de gusano del 4 %. Sin embargo, descubrieron que observando la luz de mayor energía, podían elevarlo hasta el 50 %.
¿Qué es un agujero de gusano?
Tal y como explican a la perfección en The Conversation, imagina dos ciudades situadas en dos lados opuestos de una montaña. Los habitantes de estas ciudades probablemente tendrían que dar la vuelta a la montaña para visitarse. Pero, si quisieran llegar más rápido, podrían cavar un túnel a través de la montaña para crear un atajo. Esa es la idea de un agujero de gusano.
Un agujero de gusano es como un túnel entre dos puntos distantes de nuestro universo que acorta el tiempo de viaje de un punto a otro. En lugar de viajar durante muchos millones de años de una galaxia a otra, en las condiciones adecuadas se podría utilizar teóricamente un agujero de gusano para reducir el tiempo de viaje a horas o minutos.
Como los agujeros de gusano representan atajos a través del espacio-tiempo, podrían incluso actuar como máquinas del tiempo. Se podría salir de un extremo de un agujero de gusano en un momento anterior al que se entró en su otro extremo.
Aunque los científicos no tenían pruebas de que los agujeros de gusano existían realmente en nuestro mundo, hasta ahora, esta siempre ha sido una buena herramienta para ayudar a los astrofísicos a pensar en el espacio y el tiempo.
Con todo esto sobre la mesa, hay que andar con precaución ya que si observar un agujero negro es complicado, imagínate identificar el agujero de gusano con el 50 % de posibilidades. Es cierto que ya se puede saber si es o no un agujero de gusano, pero se necesitan aun telescopios más potentes para confirmarlo al 100 %.
Fuente: computerhoy.com