Una nueva investigación desvela datos sorprendentes
El estudio del universo es un tema que nunca deja de sorprender a la comunidad científica. Si el poder conocer qué hay más allá de nuestra atmósfera ha sido algo que siempre ha sido parte de la investigación del espacio, descubrir nuevas estrellas o desarrollar teorías que no habían tenido lugar antes, son una ayuda a la hora de estudiar el espacio exterior.
Ahora la NASA ha dado un paso más en el estudio del espacio al informar que la nube de Oort, una misteriosa capa de objetos que aparecen helados en el borde de nuestro sistema, el Sistema Solar, podría tener unos brazos en forma de espiral, lo que la haría parecer a una galaxia en miniatura. De hecho, la nueva investigación de los astrofísicos de la NASA da cuenta de que ese nuevo modelo sugiere una estructura interna de la nube de Oort que puede parecer un disco espiral, tal y como se publicó en el estudio que se hizo público el pasado 16 de febrero.
La Nube de Oort, restos de otros planetas
Hay que indicar que esa denominada nube de Oort no es otra cosa que restos no utilizados de los planetas más grandes del Sistema Solar como son Júpiter, Neptuno, Urano y Saturno, que se quedaron orbitando tras la formación de los mismos, hace más de 4.600 millones de años. Es más, algunos de esos objetos son tan grandes que se podrían considerar planetas pequeños por sí mismos.
Ahora, después de estos nuevos datos, se puede afirmar que la sonda espacial de la NASA Voyager 1 no llegará a la nube de Oort hasta dentro de 300 años y no saldrá de ella hasta dentro de otros 300.000. Los expertos de la NASA, para explicar este fenómeno, utilizaron información de las órbitas de los cometas y de las fuerzas gravitacionales de dentro y fuera de nuestro sistema solar para construir un modelo de la estructura de la nube de Oort.
Fue en el momento en el que los científicos de la NASA pasaron todos estos datos por el superordenador Pleiades cuando se consiguió obtener una estructura, de la parte interior de la nube, que se asemeja a la espiral que forma la Vía Láctea. Según el modelo, los brazos de esta nube de Oort interior se extienden 15.000 años luz de extremo a extremo.
Fuente: marca.com
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